Maletas...

"Hace bastante tiempo alguien muy querido me dijo que no hay que llorar cuando algo se acaba, si no sonreír porque ha sucedido. Y sinceramente, todo lo sucedido y cada sonrisa a causa de ello no caben en una maleta ni pesan tan poco como para ser arrastrado de un lugar cercano al olvido. En una maleta no cabria la felicidad que personas que veo un par de semanas al año me proporcionan, no cabria cada tarde incierta con finalmente el mejor de los planes llevado a cabo, no cabria ese abrazo tan sincero ni esa mañana entera durmiendo por haber vivido más de noche que de día. sé que ni aun intentándolo habría reído y llorado tanto, sé que hay momentos que hablan por si solos porque en dos meses he conocido silencios más sonoros que una tormenta y miradas mas cargadas de vida que un café de buena mañana. Que debemos aprender más a abrirnos para poder dejar ir, debemos sonreír y correr cada día como si fuera el ultimo porque sé como de largo va ser este invierno , se cuantas mañanas voy a imaginarme dejando huellas por la orilla y cuantas noches voy a escribir a aquellos con los que solía hasta dormir un par de meses atrás. Que en sesenta días caben momentos que no se olvidaran pese al paso de los años, cabe mas risas que melancolía en el resto del tiempo, caben personas que nos hacen grandes con su sola presencia y que se convierten aunque por un tiempo fugaz en dosis de alegría y de claridad a partes iguales. Y lo único que quiero decir es que quizás mañana ya me haya ido, que tal vez nos hayamos ido, mañana probablemente podrían separarnos cientos de kilómetros o tal vez el frió trate de acertar hasta los huesos esta vez, puede que salir de noche ya no sea lo mismo y que vaya a echar de menos la dulzura de ciertas voces, pero si de algo estoy segura es de que si pudiera vivir de otra forma este verano, no cambiaría ni lo borroso de mis ojos al arrancar el coche y arrastrar la maleta de nuevo."
Empezando con los primeros días donde el aire veranil se siente aprovecho para dejarles este hermoso escrito de Marta Millet.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Yo no calce tu bota, compañero- Juan Carlos Distéfano.

Domingo 🍃

El mate-Lalo Mir