La literatura de Emi

Yo no creo en la amistad de mil amigos. Esos que aparentan estar, que intentan pertenecer, que quieren encajar. Esos que se hacen y se creen amigos de todos, pero que, cuando se van a dormir, saben que están solos. Yo no creo en los mil grupos y en las fotos multitudinarias. Con el tiempo, me di cuenta de que la amistad no se trata de tener muchos amigos. La amistad es tener unos pocos con quien puedas estar sin hablar y no sentirte incómodo. Es tener alguien que te escuche aunque ya le hayas contado cien veces la misma historia, es que te putee cuando lo crea necesario, es que te trate como a un hermano. La amistad no es estar encima del otro todo el tiempo, la amistad no necesita eso. Un amigo siempre va a estar aunque no se hablen por meses. Yo no creo en los mil amigos, yo creo en los pocos amigos que son un mil. -Les dejo este hermoso escrito de Calu by Rox; espero que lo disfruten y que se enamoren tanto como yo de sus escritos...

En la actualidad la tecnología ha avanzado mucho y, gracias a ella, uno de los beneficios de las que gozamos son las redes sociales, que facilitan las comunicaciones. De hecho, yo soy una afortunada porque gracias a estos medios puedo hablar con mi familia que vive a miles de millas de distancia. Sin embargo, esto también tiene su lado negativo, como por ejemplo: todas las personas vivimos muy pendientes de los móviles ya sea por WhatsApp, Facebook, Instagram, Twitter, etc…….. Hasta el punto de que podemos llegar a crear una adicción. Tal vez hablar de esto sea una exageración pero, en realidad, hay personas que son incapaces de pasar sin mirar el móvil cada diez minutos, ya esté en el trabajo, en una reunión social o familiar, el móvil les acompaña donde van, para poder publicar todos los momentos afortunados y, de hecho también los desafortunados. Sin títuloAdemás de que es una forma de no respetar nuestra propia privacidad ya que al publicar nuestras tristezas, alegrías, debi